UNA HISTORIA BAJO CADA VIÑEDO

Una bodega con historia y con futuro

UNA HISTORIA BAJO CADA VIÑEDO 

Tempranillo, una variedad única 

Los terruños son nuestra historia y su fruto, la esencia de lo que somos.  Nuestros vinos se elaboran con tempranillo, una variedad autóctona que se encuentra en la región desde tiempos inmemoriales y que da cuerpo y forma al alma a nuestros vinos. (Saber más: enlace con toda la información de abajo) 

 

—————————————————————————————————————————- 

Después de unos años donde los vinos ‘de moda’ presumían de tener poco color, ligereza y un grado alcohólico bajo, vinieron tiempos donde se buscaba el color intenso, la madera nueva y la potencia. Pero todo ha cambiado. Hoy se da menos importancia al grado alcohólico si existe equilibrio entre todos sus componentes. Triunfan tanto aquellos vinos con color y densidad, como los de poco color y delicadeza, siempre que haya armonía y donde la fruta esté muy presente. 

Por eso la tempranillo ha sido una variedad que se ha adaptado a todos los momentos por su enorme versatilidad. Siempre es el momento de la tempranillo con su perfecta unión con la comida tradicional y con algunas modernas. 

Su nombre es el diminutivo de temprano, porque madura antes que la mayoría de las variedades tintas que se adaptan a terrenos pobres en materia orgánica. Es apta para zonas con bajo o medio nivel de pluviometría y obtiene sus mejores resultados en tierras septentrionales y elevadas. Los mejores vinos proceden de zonas de alta insolación y con diferencias térmicas noche-día importantes. Se expresa perfectamente en terrenos arcilloso-calcáreos y con arena como los de Quintana del Pidio. 

Sus racimos son largos y estrechos, de hollejo grueso y pulpa carnosa y bayas esféricas de color negro azulado. 

Es una variedad autóctona que se encuentra en la región desde tiempos inmemoriales. La tempranillo es la casta más importante de España porque está presente en la mitad de las denominaciones de origen españolas y comarcas de vino de la tierra y se la conoce por diferentes nombres: tempranillo, ull de llebre, tinta del país, tinto fino, cencibel, tinta de Toro, escobera y chinchillaza o la tinta roriz del Douro portugués… 

En el vino presenta un color intenso y profundo con elegancia y finura en nariz y boca, madurez de fruto y buena estructura y equilibrio. Los aromas más frecuentes son los de frutas rojas y negras silvestres madura o ácidas, con una excelente acidez por la altura y la diferencia térmica y un marcado carácter mineral gracias a sus suelos, todo ello aderezado por una gran personalidad y una magnífica capacidad para envejecer.